La crema para bebés siempre está en la lista de cosas que deben comprarse antes de que nazca un bebé. Es un remedio para muchos problemas. Por eso, antes de comprarlo, debes averiguar qué crema elegir para que su acción sea lo más efectiva posible.
Instrucciones
Paso 1
Una crema hidratante hace un buen trabajo al cuidar la piel delicada y sensible de un niño. Se utiliza, por regla general, después del baño, restableciendo así rápidamente el equilibrio hidrolipídico alterado por el agua dura. Esta crema contiene aceites vegetales, vitamina E, extractos de plantas y glicerina.
Paso 2
La crema para la irritación también se suele llamar crema para pañales, ya que es en esta área donde la piel del bebé es más propensa a la irritación debido a la fricción constante. Los ingredientes principales de la crema antiirritante son el óxido de zinc y el d-pantenol, que matan las bacterias y crean una barrera protectora en la piel.
Paso 3
Es necesaria una crema protectora para evitar la exposición de la piel del bebé al ambiente externo. La crema protectora para bebés, diseñada para la estación fría, nutre la piel evitando que se agriete o se congele, mientras que las cremas de verano contienen filtros UV.
Paso 4
Una crema universal es imprescindible en la casa por si acaso, se puede utilizar en cualquier situación. Esta crema contiene una gran cantidad de diversos aceites, vitaminas y extractos de plantas.
Paso 5
Al elegir una crema para bebés, no debes prestar atención al tubo más brillante y colorido, ya que esto no dice nada sobre su utilidad. Para elegir una crema para bebés realmente buena, debe aprender a leer el paquete, porque siempre hay una lista de sus componentes. Tenga en cuenta que cuanto más se enumere un ingrediente en esta lista, menos estará en ese producto.
Paso 6
También es importante saber que los ingredientes como aceites minerales, parabenos y fenoxietanol no deben figurar en el paquete. Los aceites minerales (parafina, vaselina) se incluyen en muchos cosméticos, tanto nacionales como extranjeros. Y son capaces de crear un efecto invernadero que bloquea la respiración de la piel, interrumpe el intercambio de calor y el nivel natural de autorregulación. Los aceites minerales, a diferencia de los naturales, son un producto nocivo para el cuerpo humano. Los parabenos son conservantes artificiales, mutágenos y carcinógenos. El fenoxietanol aumenta la sensibilidad alérgica del cuerpo del niño, además, puede afectar negativamente al sistema reproductivo humano y tener un efecto tóxico en los sistemas nervioso e inmunológico.