Es necesario enseñar a un niño a ordenar desde una edad temprana. Muchos psicólogos confían en que cuanto antes el bebé comience a comprender sus responsabilidades, más fácil será para él en la adolescencia. La capacidad de limpiar los juguetes después de sí mismos, doblar la ropa correctamente y lavar un plato después de comer inculcará en el niño la pulcritud y la conciencia de sí mismo como persona.
Instrucciones
Paso 1
Es necesario enseñar a un hijo o hija a ayudar a los padres en la casa desde los 2-3 años. Es mejor convertir la limpieza en un juego divertido, motivando así el deseo del niño. Enséñele a su niño pequeño a organizar los juguetes en su habitación, como solo a él le gusta. Enséñame cómo hacer la cama después de una noche de sueño, dónde poner la almohada y cómo hacer el edredón correctamente. No olvides alabar al niño y decirle que ya es bastante como un adulto, créeme, estas palabras serán agradables.
Paso 2
Sigue el principio de la gradualidad, no obligues al niño a limpiar si no quiere, nunca vayas a gritos, amenazas y ultimátums. Trate de mostrarle y explicarle al niño que es su responsabilidad directa mantener sus cosas y juguetes en orden, y le molesta mucho su desobediencia. Nunca soborne a un niño con las palabras: "Ahora pondrás las cosas en orden y yo te daré un dulce delicioso". En el futuro, esto no traerá nada bueno, además, el niño comprenderá que la alabanza material sigue al favor.
Paso 3
Dé el ejemplo y comience a limpiar la casa usted mismo, es probable que el bebé esté feliz de ayudarlo con esto. Limpie el polvo de los estantes, muestre cómo hacerlo, sugiera que limpie el resto de los estantes usted mismo. Para que el proceso se sienta relajado y divertido, encienda música que los alegrará a usted y a su bebé. Una vez completada la limpieza, felicite a su hijo y dígale que está muy orgulloso de él.