Todo el mundo sabe que criar hijos no es fácil, especialmente durante el crecimiento, cuando un niño tiene preguntas sobre las diferencias de género. ¿Se debe informar al niño sobre ellos?
No te deshagas de él con frases generales, ya que esto puede despertar su interés. Lo mejor es elegir un tono de conversación tranquilo y neutral, no avergonzarse por sus preguntas, no sonrojarse o poner los ojos muy abiertos, ya que el niño lo notará. Puede dar ejemplos sencillos de la vida de animales o plantas y decir que la naturaleza que nos rodea es diversa.
También puede decirle a su hijo que muchos fenómenos existen como mitades de un todo. Hay luz y oscuridad, llanto y risa, día y noche; después de todo, no pueden prescindir el uno del otro. Entonces nosotros, las personas, existimos en parejas, hombre y mujer, que no pueden vivir el uno sin el otro.
Los hombres están construidos de tal manera que son fuertes y resilientes, es decir, tienen su lugar en este mundo, por ejemplo, en algunas profesiones que están destinadas a ellos. Las mujeres son completamente diferentes. Son capaces de hacer lo que los hombres no pueden: ser económicos, bellos y cosas por el estilo.
A los niños les interesan las diferencias de sexo a partir de los cuatro años, pero esta corta edad no significa que se pueda jugar con su ingenuidad o estupidez. Hay niños que tienen una conciencia plena del mundo y ellos mismos en este mundo ya están bien formados para esta edad, por lo que no deberían mentir. Lo mejor es plantear todas las preguntas de forma sana, es decir, componer, al menos en tu cabeza, una respuesta veraz, completa y a la vez sencilla y accesible.
El desarrollo del componente sexual del niño es un momento muy sutil y necesario, por lo que este problema no desaparecerá por sí solo, es necesario discutirlo y explicarlo. A veces es útil hablar un poco de lenguaje científico, luego el niño se aburrirá y cambiará a otra cosa.