El calcio durante el embarazo es necesario para reducir el riesgo de parto prematuro o aborto espontáneo, presión arterial alta y pérdida de sangre durante el parto. Ayuda a preservar los dientes y evitar calambres en los músculos de la pantorrilla, y el calcio protege al feto del raquitismo. ¿Cuál es la ingesta correcta de calcio durante el embarazo?
Instrucciones
Paso 1
Recuerde que el requerimiento diario de calcio durante el embarazo es de 1500 mg.
Paso 2
Tome calcio de forma natural de los alimentos para una mejor absorción. El calcio en forma sintética puede provocar una sobredosis, la formación de arena en los riñones y, en casos raros, piedras.
Paso 3
Beba 2 vasos de leche al día desde los primeros días de embarazo. Si no tolera bien la leche, reemplácela con kéfir o yogur. Consuma 150-200 g de requesón y unas rodajas de queso al día. Por lo tanto, creará una "reserva de calcio" en su cuerpo.
Paso 4
Utilice cáscaras de huevo como fuente natural de calcio. Para hacer esto, hierva algunos huevos, retire la película interior, encienda la cáscara en una sartén. Luego muele las cáscaras hasta convertirlas en polvo en un molinillo de café. El polvo preparado se puede agregar a sopas y platos principales en su menú. Los médicos recomiendan una dosis de 0,5 cucharaditas por día. Otra forma: extinga el polvo de calcio con jugo de limón fresco antes de beber; se forma citrato de calcio, que el cuerpo absorbe mejor.
Paso 5
Tome vitamina D y alimentos que la contengan: yemas de huevo, hígado de bacalao y aceite de pescado. La vitamina D ayuda a la absorción de calcio y su retención en el cuerpo.
Paso 6
Consulte a un especialista si su rostro tiene deficiencia de calcio en el cuerpo: el cabello se cae o las uñas se rompen. En este caso, el médico prescribirá suplementos de calcio.