Cuando hay un niño pequeño en la familia, la madre tiene que dar vueltas por la casa, tomando descansos del trabajo solo durante el sueño nocturno. Las rutinas diarias no terminan y, por momentos, parece que las cosas no se hacen más pequeñas. Es hora de detenerse y pensar en cómo hacer todo para que todo se pueda hacer.
Instrucciones
Paso 1
La mayoría de las madres están ocupadas con sus hijos todo el día y hacen las tareas del hogar cuando el bebé se acuesta. El principal error es el deseo de rehacer todo a la vez. El resultado de tal deseo puede seguir siendo el mismo montón de asuntos pendientes. Aprenda a planificar con claridad: en qué días de la semana está limpiando, en qué planchado.
Paso 2
Planifique todo con cuidado. Haga un menú para la semana que viene: entonces sabrá exactamente cuándo ir al supermercado y cuánto tiempo dedicar a preparar la cena. Trate de distribuir las cosas de tal manera que solo las cosas urgentes se puedan hacer solos: pasear con el bebé, cocinar la comida, etc. Y todo lo demás - limpiar, planchar y demás - posponer hasta la llegada de papá o otras personas cercanas. Podrás confiarles el control del bebé, y tú mismo, tranquilamente, sin "crujir", rehacerás todo el trabajo.
Paso 3
Evite las actividades "innecesarias". Analiza: ¿cuál de ellos haces constantemente y al mismo tiempo sientes que nunca los hiciste? Seguramente habrá un par de casos así. Por ejemplo, una miga arroja juguetes todo el tiempo y constantemente caminas por la casa y los recoges. Detenga las acciones innecesarias, no desperdicie su energía y su tiempo. Antes de que el niño duerma la siesta, retire todo lo que se interponga en su camino. Por la noche, confíe la restauración del orden a papá.
Paso 4
Cuando planifique, asegúrese de reservar una hora de siestas para usted, especialmente si no duerme lo suficiente por la noche. La fatiga crónica reduce tu rendimiento: si se acumula demasiado, tendrás dificultades para realizar acciones elementales.
Paso 5
Si no se cuida, nadie lo hará por usted. Y no olvide hacer una pausa al menos una vez a la semana. Ve de compras, cómprate algo nuevo, siéntate con un amigo en un café, ve al teatro o al cine. Tome descansos de su rutina diaria y tendrá la energía para mantenerse al día con todo.