La comunicación activa e interesada con un niño desde los primeros días de su vida es garantía de amistad y entendimiento mutuo entre padres e hijos. No descuide esta simple verdad, incluso si le parece que el niño es muy pequeño y no entiende nada, que no vale la pena gastar palabras en él, esto no es así. Los niños que crecen en hogares para bebés pueden servir como una ilustración triste: se les alimenta, baña, envuelve, trata si es necesario, pero nadie les habla. Como resultado, la diferencia entre los niños "domésticos" y "estatales" se vuelve muy notable ya a la edad de un año …
Instrucciones
Paso 1
Es necesario desarrollar al recién nacido constantemente: durante la comida y el baño, jugando e incluso relajándose. Desde el primer mes, entrena la atención del bebé: enséñale el juguete, muévelo de un lado a otro para que el niño lo mire con los ojos y habla, llámalo por su nombre, dile qué hermoso juguete, qué color, qué es el nombre.
Paso 2
Mientras se baña, comente todas sus acciones: qué tan tibia y limpia está el agua, qué tan bueno es nadar en ella, qué manos y pies limpios tendrá el bebé. No tenga miedo de cantar una canción de cuna a su hijo antes de acostarse, incluso si se duerme bien y así, no lo malcriará ni lo malcriará, pero el oído para la música se desarrollará desde los primeros días de vida.
Paso 3
No cuelgue demasiados juguetes sobre la cuna o el cochecito: la atención del niño está dispersa y no podrá estudiarlos realmente. Una es suficiente para que el bebé pueda alcanzarlo, darle la vuelta, incluso quedarse dormido en su boca: para los bebés, el tacto es una de las herramientas más importantes para aprender sobre el mundo. Por supuesto, los juguetes deben estar limpios. Después de que el juguete ya haya sido estudiado y cansado, reemplácelo por otro.
Paso 4
El desarrollo físico de un recién nacido es tan importante como el mental. Al nadar, es muy útil poner la palma de la mano debajo de los pies del niño para que empuje con las piernas; estos son, se podría decir, sus primeros ejercicios en la piscina. El mismo ejercicio se puede repetir cuando se sostiene al bebé verticalmente en sus brazos: coloque la palma de la mano debajo de sus piernas para que descanse y se repele.
Paso 5
Entre comidas, haga ejercicios con el bebé: - El bebé se acuesta boca arriba. Tome sus brazos, sepárelos con cuidado y luego crúcelos sobre su pecho. Repite varias veces.
- Doble suavemente las piernas del bebé a la altura de las rodillas, separándolas. Este ejercicio desarrolla las articulaciones de la cadera del bebé y estimula el movimiento intestinal.
- A partir del segundo mes, acueste al bebé boca abajo durante unos segundos, aumentando gradualmente el tiempo. Esto fortalece la columna y, nuevamente, mejora la digestión.
Paso 6
Recuerda: la salud y el desarrollo de tu bebé está en tus manos.