A la mayoría de los niños les gustan mucho los animales, y en algún momento hay una solicitud para tener su propia mascota. Pero la apariencia de una mascota no siempre es fluida. ¿Qué necesitas saber para que un niño y un animal se conviertan en amigos?
Preparación de mascotas
Muchas parejas ya tienen mascotas cuando tienen un bebé. Gatos, perros, pájaros o peces: cualquier animal debe estar preparado para el hecho de que la familia pronto se repondrá. Tanto un niño pequeño como un animal pueden, por inexperiencia, hacerse daño entre sí, por lo que debe tratar de evitar esto tanto como sea posible. Para hacer esto, debe reorganizar la jaula, la casa y el acuario de la mascota en un lugar inaccesible para el niño. Si el animal se mueve libremente por la casa, debe intentar entrenarlo para evitar lugares donde pueda entrar en contacto con el niño, como una cama y una mesa. También es necesario comprender cómo reaccionará el animal a varios toques, para probar, mover ligeramente a la mascota por las patas y la cola, para que quede claro cómo reaccionará a los toques del niño.
Primera cita
Se le debe decir al niño de antemano cómo comportarse con el animal y qué evitar. No se debe permitir que el niño sea cruel con la mascota, pero si esto sucede, es necesario explicarle al niño que tales acciones son perjudiciales para la salud del animal. Involucrar al niño en el cuidado diario de la mascota le ayudará a sentir mejor que el animal no es un juguete, sino un ser vivo con sus propias necesidades.
Elegir una mascota
El primer paso es comprender lo que quiere el niño. Para hacer esto, puede ir a un zoológico o una exhibición de animales y ver qué animales mostrarán el mayor interés del niño. También debe comprender claramente que hay animales que pueden ser peligrosos para un niño. Hay razas de perros especialmente agresivas y animales exóticos venenosos. También debe tener en cuenta la esperanza de vida de la futura mascota; es mejor llevar un animal pequeño para que pueda crecer con el niño.
Influencia de los animales en los niños
Siempre que tanto el niño como los animales estén preparados para el encuentro, la aparición de la mascota es una gran alegría para el bebé y su familia. Observar un animal agrega un nuevo interés común a la familia, hay juegos conjuntos con la mascota, cuidarla, un deseo de complacer a un nuevo miembro de la familia con algo. Se debe informar al niño de que, aunque el animal se compra en la familia, es el niño mismo quien se convierte en el dueño de la mascota. Es su cuidado y atención por el animal lo más importante. Tener tu propia mascota despertará responsabilidad y empatía en tu hijo.
Para que el niño no pierda interés en la mascota, debe pasar más tiempo con la mascota. Pueden ser caminatas activas o juegos en casa, puede intentar enseñar los comandos de los animales. Si se trata de una mascota con la que no puede pasar tiempo activamente, entonces vale la pena leerle a su hijo historias sobre estos animales o ver documentales.
Si se siguen estas recomendaciones, la mascota se convertirá en un verdadero amigo del niño y le traerá una gran alegría a él y al resto de la familia.