Muchos se han enfrentado al problema de acostar a sus hijos. Los padres quieren tanto disfrutar de su tiempo libre, y el proceso de conciliar el sueño se retrasa o el bebé es muy caprichoso. Este artículo le dirá qué hacer al respecto y cómo consolidar el resultado positivo.
Instrucciones
Paso 1
Puede escribir mucho sobre la rutina diaria, sobre juegos activos y tranquilos, sobre comida antes de acostarse, etc. Sin embargo, imagínese si se quedará dormido tranquilamente si está preocupado por el hambre o el dolor de cabeza. Creo que el proceso de quedarse dormido en este caso se convertirá más bien en una tortura …
En primer lugar, preste atención a las necesidades fisiológicas del niño. Pregúntate a ti mismo las siguientes preguntas:
1. ¿Está sano el bebé? Verifique su temperatura corporal, si su nariz está respirando bien, en los niños que han aprendido a hablar, puede preguntar si tienen algún dolor.
Paso 2
2. ¿Quiere el niño usar el baño? A un bebé se le debe cambiar el pañal, incluso si está un poco mojado. Si un niño en edad preescolar se resiste a ir al baño, es mejor no insistir: nuestra tarea es acostar al niño con la mayor calma posible y no organizar una reprimenda por desobediencia.
Paso 3
3. ¿El ambiente de la habitación interfiere con el sueño? Verifique la temperatura de la habitación, puede valer la pena ventilar un poco, si está tapada, si la luz de la ventana molesta al niño. No abuses de las luces de noche, no deben ser brillantes ni brillar en la cara.
Paso 4
4. ¿Quiere comer el niño? La mayoría de los bebés se duermen por la noche solo después de alimentarse. Nadie habla de una comida de tres platos para un niño. Sin embargo, el hambre provoca ansiedad y, por lo tanto, interfiere con el sueño. Para eliminar el problema, son adecuadas una rodaja de manzana, una rodaja de queso, un vaso de yogur o kéfir.
Paso 5
5. ¿Está limpio el niño? Puede que se sorprenda, pero no es necesario que bañe a su bebé con espuma todos los días. Basta con observar las reglas de higiene: lavarse las manos, lavarse las mejillas y los labios, cepillarse los dientes y lavarse los lugares íntimos.